Durante la entrevista con el Dr. Berlin, Hilary reveló que su misión en el segundo parto era "mantener las cosas lo más natural posible" mientras que para el nacimiento de Luca estaba segura que haber querido dar a luz en el hospital y tener la inyección epidural. "Pasó luego de que me embaracé pero estaba en mi primer trimestre", contó sobre su decisión de tener un parto en casa. "Comencé a pensar que quería una experiencia diferente. Soy más grande ahora, amo la maternidad más que nada. Nunca pensé que podía ser así. Nunca creí que me pudiera sentir tan feliz y plena". Hilary contó que Matthew apoyó su decisión luego de ver el documental The Business of Being Born. "Él fue asombroso", contó. "Tenía algunas dudas, estaba como: 'Déjame investigar un poco, pero te apoyo'". En una entrevista después del parto, la actriz contó que entró en labor en medio de la noche y pasó el tiempo caminando y limpiando la casa mientras esperaba la llegada de la partera y su ayudante. También llegaron Haylie y Susan para cuidar a Luca mientras que Matthew la ayudaba a sobrellevar las contracciones. Hilary lloró "lágrimas de felicidad" cuando le dijeron que ya podía dar a luz en una bañera. "Cuando tengo algo en la cabeza, lo quiero", dijo ella. "Soy cabeza dura". La estrella reveló que siguió la tendencia de tomar su placenta en un batido con "muchas bayas" y se guardó un poco para futuros batidos. Finalmente, Hilary admitió que estaba "asustada" por dar a luz naturalmente pero que lo haría "totalmente" otra vez. "Fue aterrador pero luego me sentí muy fuerte", dijo.
-- Hilary durante una de las entrevistas --
Fuente: Yahoo
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